Nuevos avances en la estimación no destructiva de la madurez y calidad de las principales variedades de mango cultivadas en España mediante el uso de sensores NIRS portátiles.
La aparición en el mercado de equipos NIRS portátiles cada vez más accesibles para cualquier usuario puede ser de gran ayuda para el sector del mango español a la hora de evaluar de forma rápida y no destructiva la madurez y calidad interna del fruto. Para ello, es preciso validar distintos instrumentos con prestaciones diversas en las dos principales variedades de mango cultivadas en España. Ese ha sido el objeto de este estudio, en el que han participado Javier Téllez y J. Jorge González, del IHSM La Mayora (UMA-CSIC), en colaboración con la Universidad de Córdoba. Los resultados mostraron que un sensor NIRS calibrado con muestras locales permitió predecir con gran precisión parámetros clave para determinar el momento óptimo de cosecha, como el contenido de azúcares, la firmeza de la pulpa o la materia seca. Estas medidas, tradicionalmente obtenidas mediante análisis destructivos, pueden ahora realizarse de manera inmediata sobre el fruto intacto, lo que facilita la toma de decisiones en campo, mejora la calidad final del producto y la satisfacción del consumidor, y contribuye a reducir las pérdidas postcosecha y aumentar la competitividad en el mercado. En cambio, un sensor precalibrado con mangos de distintas variedades procedentes de Australia, Brasil y México mostró una precisión insuficiente cuando se aplicó a las variedades “Osteen” y “Keitt” cultivadas en la provincia de Málaga. Por ello, el estudio propone una serie de recomendaciones para mejorar la fiabilidad, robustez y capacidad predictiva de los dispositivos comerciales, y avanzar hacia un uso más universal y efectivo de esta tecnología en el sector del mango.
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